Ordenaciones sacerdotales y diaconales de Alumnos APRA
Recientemente, uno de nuestros hermanos ha recibido la ordenación sacerdotal y otros 15 han recibido el don de la ordenación diaconal.
La Ratio Institutionis de la Legión de Cristo recuerda en su número 838 que «la dimensión del servicio es esencial en el ministro ordenado» y que «por la imposición de las manos del obispo, el diácono es consagrado para “servir al pueblo de Dios en la diaconía de la liturgia, de la palabra y de la caridad”. El diácono realiza esta misión de servicio especialmente cuando en su vida personal, comunitaria y apostólica reza en nombre de la Iglesia la Liturgia de las horas, colabora con los sacerdotes en el servicio del altar y de la predicación, y ejerce la caridad en sus diversas manifestaciones».
Presentamos una reseña de las ceremonias celebradas en los distintos territorios.
El 1 de julio, monseñor Gines García, obispo de Getafe, ordenó diácono al padre Santiago Vázquez en la Basílica menor del Sagrado Corazón de Jesús en el Cerro de los Ángeles de Madrid. Además de sus padres, estuvo presente su hermano José David, quien es sacerdote diocesano de Valladolid. También estuvieron presentes en la ceremonia otros familiares y amigos, un grupo de legionarios y algunos miembros del Regnum Christi. Las consagradas se ocuparon de los cantos.
También el 1 de julio, pero en la ciudad de Guadalajara, Mons. Jorge Patrón Wong, arzobispo de Xalapa, ordenó diáconos a los religiosos Gustavo Godinez y a Juan Pablo Castañeda en el Templo Expiatorio. En la ceremonia de ordenación estuvieron presentes, además de las familias de los nuevos diáconos legionarios, consagradas y miembros del Regnum Christi de diferentes comunidades de México. Dado que el P. Juan Pablo Castañeda tiene dos hermanos legionarios que también son sacerdotes, ellos concelebraron la misa.
El 22 de julio, en la ciudad de Cancún, fue ordenado diácono el padre Jesús Silva por manos de monseñor Pedro Pablo Elizondo, L.C., obispo de Cancún-Chetumal, en la capilla universitaria de la Universidad Anahuac. Además de la familia del P. Jesús, y de varios sacerdotes diocesanos y legionarios, se destacó la participación de los sacerdotes legionarios de la residencia para sacerdotes mayores o enfermos de Cancún.
El mismo día, 22 de julio, en Rionegro (Colombia), el P. Carlos Quiñones fue ordenado diácono por manos de monseñor Fidel León Cadavid, obispo de Sonsón-Rionegro, en la capilla del Centro Vocacional de Colombia. Además de la familia y algunos amigos del p. Carlos, estuvieron presentes en la santa misa los legionarios del Centro Vocacional, los novicios y algunas consagradas.
El 29 de julio, en la ciudad de Regina (Canadá), el padre Kevin O’Byrne fue ordenado diácono por manos de monseñor Stephen Hero, obispo de Prince Albert. Además de la familia del P. Kevin, le acompañaron los padres legionarios Steven Reilly, Fergal Ó Dúill y Kenneth Leblanc. Los miembros del Regnum Christi de esa localidad de Canadá se ocuparon de la organización de la ceremonia. El P. Kevin inicia su ministerio como capellán del ECYD y en el Highlands School de Dallas.
El 5 de agosto, en la Basílica de Nuestra Señora de los Dolores, en la capital de Rio Grande do Sul (Brasil), monseñor Jaime Spengler, arzobispo de Porto Alegre, ordenó diácono al P. Gustavo Ballestrin. En la misa participaron, además de la familia del P. Gustavo, amigos (entre ellos muchos de sus ex compañeros de la apostólica), el director territorial, algunos legionarios, la directora territorial de las consagradas, Kate O’Connor, y miembros del Regnum Christi de Rio Grande do Sul.
El 12 de agosto, en la ciudad de Atlanta (Estados Unidos), fue ordenado diácono el padre Christopher Daniels por manos de monseñor John Tran, obispo auxiliar de Atlanta, en la Parroquia de St. Brendan the Navigator (parroquia atendida por los legionarios de Cumming, Georgia.) En la ceremonia de ordenación, además de la familia del P. Christopher, estuvieron presentes 28 legionarios. Algunas consagradas, además de encargarse de los cantos, acompañaron la ceremonia, en donde hubo participación de muchos miembros de las secciones del Regnum Christi.
Los padres Cristian Ortega, Sebastián Sánchez y Christían Martínez fueron ordenados díaconos el 19 de agosto en la Basilica Menor de Nuestra Señora de Lourdes, en Bogotá (Colombia). La ceremonia estuvo a cargo de monseñor Luis Manuel Alí Herrera, obispo auxiliar de la arquidiócesis de Bogotá. Además de las familias de los nuevos diáconos, estuvieron presentes legionarios de la comunidad de Bogotá, sacerdotes diocesanos, ex compañeros de la Legión, las consagradas de la comunidad de Bogotá y un laico consagrado.
El mismo día, 19 de agosto, pero en la Ciudad de México, fue ordenado sacerdote el padre Marco Antonio de la Cruz en la Basílica de Guadalupe, por manos de monseñor Raúl Gómez González, arzobispo de Toluca. En la misma ceremonia fueron ordenados diáconos otros dos legionarios de Cristo, los padres Eduardo Perdomo Leal y Diego Adrián Páez. En la ceremonia estuvieron presentes las familias de los ordenandos, así como miembros de varias comunidades de la Ciudad de México.También participaron miembros del Regnum Christi.
El 21 de agosto, en la Parroquia Santísimo Salvador en San Cristóbal, Venezuela, el padre Jesús Mora recibió la ordenación diaconal por manos de monseñor Mario Moronta Rodríguez, obispo de San Cristóbal. En la ceremonia estuvieron presentes familiares y amigos del padre Jesús, asi como algunos legionarios que trabajan apostólicamente en Venezuela.
El 26 de agosto, en la ciudad de Bundang (Corea del Sur), el padre Abraham Eo fue ordenado diácono por manos de monseñor John Moon Hee Jong, obispo auxiliar de Suwon. La parroquia donde fue ordenado el P. Abraham es su parroquia de origen: ahí fue bautizado y ahí recibió la primera comunión. Es la parroquia más grande de Corea numéricamente y territorialmente. Además de la familia del P. Abraham, le acompañaron legionarios de la comunidad de Seúl, Manila y uno que lo acompañó proveniente de Roma.
Felicitamos a todos los que han recibido el diaconado o el presbiterado en estos últimos meses y encomendamos a Dios Nuestro Señor su vida y su ministerio para que sean dignos instrumentos de Cristo para llevar su mensaje de esperanza y salvación a las almas.
(Fuente: la red del Regnum Christi)