A partir de la pregunta antropológica fundamental: ¿quién es el hombre? este curso investiga el profundo significado existencial en un movimiento «de abajo», es decir, desde la «horizontalidad» de la experiencia en primera persona de vivir y sentir, hacia lo «alto», es decir, en la dirección de «verticalidad» que capta el significado de saber, de pensar, de entender, de desear, de querer, de elegir, de amar, de experimentar dolor y felicidad. Todas las dimensiones humanas se experimentan en un contexto relacional; el ser humano está en contacto con otros seres similares, en un mundo que lo rodea y lo conforma, inmerso en la temporalidad espacial. Desde el conocimiento concreto, arraigado en el mundo sensible que lo rodea, el ser humano tiene la peculiaridad de trascender todo esto, abriéndose a una dimensión que lo supera y, al mismo tiempo, lo comprenda. Al captar la profunda esencia del hombre, que se descubre como «persona», el curso tiene como objetivo proporcionar las herramientas conceptuales y metodológicas para reflexionar sobre uno mismo y llegar a reconocerse: seres arraigados en el horizonte de este mundo, moldeados por la materia y la temporalidad; seres que trascienden este horizonte y están impregnados de espiritualidad.