Testimonio de Anamaría Mardonez, Consagrada, ex estudiante de Ciencias Religiosas
Soy Anamaría Mardonez, consagrada del Regnum Christi. En la actualidad me desempeño como miembro del equipo de Acompañamiento espiritual y pastoral en la Clínica San Carlos de Apoquindo, perteneciente a la red de salud UCCHRISTUS, en Santiago de Chile.
He tenido la oportunidad de estudiar Magisterio en Ciencias Religiosas en la Universidad Pontificia Regina Apostolorum de Roma. Dicho título permitió que el 2017 iniciara un curso de Alta formación en pastoral de la cura y salud de la Universidad Lateranense y a continuación realizara un curso de formación profesional de un año en el Mater Misericordie Hospital en Dublín, Irlanda en acompañamiento espiritual y pastoral de pacientes, obteniendo la certificación de “Healthcare Chaplaincy”.
Siendo el hospital es un espacio humano muy rico y particular para hacer presente a Dios, se requiere que el agente pastoral posea conocimientos y competencias que Ciencias religiosas ofrece como base.
El rol de quien ofrece asistencia espiritual en salud es multiforme, los pacientes y sus familiares experimentan momentos difíciles, duda, oscuridad, incerteza y con frecuencia impotencia. El equipo sanitario que atiende al paciente es otro de los grupos que requieren de la espiritualidad como recurso en el desarrollo de su misión y profesión.
La pastoral en ámbito clínico tiene aspectos celebrativos tales como el bautizo, la reconciliación y la celebración del sacramento de la unción de los enfermos.
El dar sentido al dolor y sufrimiento están relacionado con los misterios de la pasión muerte y resurrección de Jesucristo.
Con cierta frecuencia me toca acompañar en el momento de la muerte de un paciente, sostener a la familia desde la fe en la vida eterna y la fidelidad de un Padre que nos ama.
Sin embargo, cada vez con más frecuencia el encuentro es con pacientes de otras iglesias y/o religiones y personas no creyentes entre otros. La visión cristiana con su misericordia puede abrir puertas a la esperanza en el momento tan único que es la muerte.
El Magisterio en Ciencias Religiosas da herramientas pastorales que permiten hacer accesible a todos la belleza de nuestra fe y necesidad de una visión integral ante el dolor de la persona por la enfermedad y muerte.
